El asesinato del recordado cantante de Armonía 10, Paul Flores, provocó una ola de indignación ciudadana que motivó la Marcha contra la Inseguridad el pasado viernes en el Centro de Lima.

La movilización congregó a cientos de ciudadanos y figuras del medio artístico que se movilizaron para exigir que el Gobierno tome medidas para frenar los atentados a mano armada que enlutan al país.

Llevaba una bandera peruana con los colores negro y blanco como protesta por la muerte de Flores, con quien interpretó “El pendejerete”, una de las canciones más sonadas de 2024.

El impacto por la muerte del ‘Russo’ afectó a la artista, quien rompió a llorar en plena caminata.

Las amenazas de los extorsionadores no son nuevas en el mundo de la música. El líder del Grupo 5, Christian Yaipén, reveló que debe contratar escoltas con armas de largo alcance y hasta francotiradores para poder garantizar su seguridad y la de su equipo en cada presentación.

“Todas las agrupaciones de cumbia van con escoltas, con ametralladoras, con armamento largo, con todo para la defensa de los delincuentes”, dijo.

LA HUELLA DEL ‘MONSTRUO’

El atentado contra el músico llevó la firma de Erick Moreno Hernández (34), alias el ‘Monstruo’ (ver recuadro), el cabecilla de Los Injertos del Cono Norte, la banda criminal que ha sembrado el terror en la capital.

Esta organización criminal se dedica al secuestro, la extorsión y al cobro de cupos, principalmente en Lima Norte.

El mánager de Armonía 10, Agustín Távara, denunció que el delincuente le escribió después de matar a Paul Flores para exigirle una fuerte suma de dinero y una fecha mensual a cambio de no matar a otro de sus músicos.

“Evita que siga matando a tus cantantes y alinéate conmigo: S/70,000 y una fecha por mes. Yo no quiero padrinos porque yo soy el papá de papás. Así que ya sabes, las cosas claras”.

En otro mensaje, el criminal continuó con sus amenazas para presionar a Távara a ceder a la extorsión.

“Yo soy un maldito. Cuando me retan tardo, pero no me olvido, y ustedes me subestimaron y esas son las consecuencias”, advirtió amenazante el delincuente de 34 años.